miércoles, diciembre 13, 2006

¡QUE DESGRACIA TAN INFINITA!

Revisando mis archivos musicales, mi colección de cd's, dvd's, casettes y acetatos (si, todavía tengo acetatos y es más tienen mejor sonido que cualquier otro formato y las carátulas son de lujo), me voy dando cuenta de una amarga verdad: las cosas buenas, y las cosas que me gustan lentamente van desapareciendo.

Durante el transcurso de mi vida he tenido que ver la muerte de grandes artistas como
Freddie Mercury, los supuestos suicidios de Kurt Cobain y Michael Hutchence , el asesinato de John Lennon , la disolución de bandas como Soda Stereo, Los Rodríguez, Los Fabulosos Cadillacs, y una considerable cantidad de tragedias por el estilo.

Por otro lado existe otra buena dosis de bandas y artistas que si bien no están retirados, no tienen producciones recientes o bien ya solo se dedican a hacer recopilaciones de sus grandes éxitos.

No se, tal vez se deba a que ellos al igual que yo están envejeciendo y ya no están "para esos trotes" (existen sus excepciones: Tom Jones y obviamente los Rolling Stones).

En ultima instancia lo que mas rabia me da, es saber que al otro lado del espectro pululan una horda de "artistas" vomitados por una sarta de "programas" televisivos, realities y hasta telenovelas, que a su vez no tendrían éxito (demasiado efímero por demás), si no fuera por la mas intensa, descarada y falta de estética (y ética) campaña de bombardeo publicitario que llega a las pobres mentes de un pueblo falto de oportunidades de educación, que a estas alturas de la vida y con un mundo hyper-mediático, no son capaces de diferenciar la mierda de la pomada.

Bien lo diría un personaje de una telenovela ¡que desgracia tan infinita!